Se ha preguntado ¿Cúando es tiempo de preocuparse por su próstata?
Boletin 11 | año 2

Señor ¿cada cuánto se acuerda de su próstata? ¿O acaso ella sola se hace presente con las molestias que le provoca? ¿junto con las dificultades para orinar también tiene problemas de erección? No la olvide ni espere a que le llame la atención. Mejor trabaje en pro de ella.

Desde octubre del 2004 se dio a conocer la campaña de información y detección oportuna de las enfermedades de la próstata denominada “Hombres trabajando en pro de su próstata”, una iniciativa de los laboratorios Merck Sharp & Dohme, dirigida a los caballeros mayores de 45 años, con la intención de prevenir y tratar oportunamente los padecimientos típicos de esta glándula, de los cuáles uno de los más frecuentes es la hiperplasia prostática.

Afecta, según los datos de la mencionada campaña, al 50% de los hombres mayores de 50 años y su incidencia aumenta con la edad; el 60% de los hombres de 60 la padecen y 80% de los 80.

Con este padecimiento se experimentan molestias al orinar como un chorro muy fino, débil y entrecortado, frecuentes ganas de ir al baño especialmente en las noches y dificultades para controlar que hacen que de pronto haya pequeñas emisiones involuntarias de orina.

La hiperplasia es un crecimiento de la próstata benigno, no significa que haya cáncer, pero al crecer, la glándula aprieta la uretra y provoca estas molestias que cada vez se hacen más intensas y presentes. Es un problema que se trata y se controla, pero para ello hay que visitar al urólogo, y si el problema ya está demasiado avanzado es posible que sea necesario extirparla.

Ahora, si un alto porcentaje de hombres mayores de 50 tiene hiperplasia prostática y otro alto porcentaje de esa misma edad presenta disfunción eréctil, es frecuente que ambos padecimientos se den al mismo tiempo. Y si de por sí recibir un diagnóstico de hiperplasia es una experiencia compleja, que ésta se presente aunada a una disfunción eréctil, lo es aún más.

Eso lo saben los médicos y por eso han investigado los efectos que pueden tener los fármacos que facilitan la erección en los hombres en esta situación.

Es importante detectar este tipo de problemas a tiempo, pero además, si puede hacer algo por prevenir ¿por qué no hacerlo? Recuerde que contraer y soltar varias veces al día los músculos pubococcígeos (aquellos que pasan por la entrepierna) masajea la glándula y ayuda a evitar endurecimientos y otros males al mismo tiempo que le permite tener un mejor control de la salida de la orina y del momento de la eyaculación.

Es de vital importancia que exista una buena comunicación con la pareja para superar estos momentos de estrés. Ambos se verán sometidos a sentimientos muy fuertes que pueden hacerles sentir irascibles o retraídos, y entorpecer la comunicación abierta entre los dos. Puede resultar difícil entender las necesidades de la pareja, ya que pueden ser muy distintas de las propias y es fácil frustrarse en el intento de compaginar las necesidades de los dos.

Es fundamental reconocer sus sentimientos sin intentar controlarlos ni disimularlos. Hable francamente con su pareja sobre lo que siente y anímele a que hable con usted abiertamente y con franqueza.

Tengan, en cuenta el humor del paciente: si se muestra demasiado alegre podría darle la impresión de que no entiende cómo se siente. También habrá veces en que la mera presencia de la pareja será suficiente para reconfortarlo, no siempre es necesario hablar.